Sacado de Jurisprudencia civil (Recurso de casación de 10 de Octubre de 1889.- Tomo 66 año 1890)
Resultando que ocurrido el fallecimiento de Doña Bárbara Hidalgo, personada en los autos como heredera de su hijo D. Antonio Galcaso, fueron citados sus herederos, que no comparecieron, y en 28 de Febrero de 1888 dictó la Sala de lo civil de la Audiencia de Sevilla sentencia revocatoria, declarando haber lugar a la adjudicación de los bienes que constituían la dotación de la capellanía fundada por Miguel arias Antequera a favor de D. Juan Gómez Morilla como de libre disposición en el concepto de concesionario de los derechos de Doña María Teresa tamarit, heredera de D. José, y de Andrés Tamarit con la obligación de levantar y pagar previamente las cargas eclesiásticas en la forma convenida en el convenio ley de 24 de Junio de 1867, sin hacer expresa condenación de costas en ninguna de las instancias.
que la acción para reclamar la propiedad de los bienes que bajo cualquier denominación fueron vinculados, no podía ejercitarse útilmente sino por las personas que prueban de una manera cumplida su parentesco con el fundador o su llamamiento personal, tal vez que según quedaba demostrado no resultaba probado el supuesto parentesco de Doña Teresa Tamarit, cedente de D. Juan Gómez Morilla, con D. Miguel Arias Antequera, fundador de la capellanía que se trataba.